Mucha gente tiende a pensar, aunque cada vez menos, que si una imagen está colgada o publicada en Internet es de libre utilización. Pero ello no es así. Lo mismo podríamos entender con los datos o imágenes concretas de personas que aparezcan en Internet… pero de este tema hablaremos otro día en detalle.
Si lo que quieres es utilizar imágenes creativas, que te sirvan para ilustrar alguna cosa de tu blog pero que no sean tuyas directamente, ni de personas que te las hayan facilitado (con autorización por escrito siempre, sobretodo), te recomendamos tengas en cuenta los siguientes consejos:
1. Utiliza fotografías libres de derechos, si puedes hacerlo y te sirven. Esto significa que si no sabes de quién es la imagen y no sabes si está sujeta a derechos, mejor no la utilices.
2. Para saber si una imagen está sujeta a derechos, puedes mirar si en la imagen donde la estás visualizando pone alguna nota relativa a los derechos; o bien si está sujeta a lo que se llaman licencias Creative Commons (estas licencias suelen utilizarse mucho en Internet y junto a la imagen pone el tipo de licencia que permite el autor; si por ejemplo, te permite publicar la imagen indicando su condición de autor; si te permite utilizarla para fines comerciales o no; si te permite cambiarla o retocarla…).
También puedes mirar en Google Imágenes, ir a Herramientas de Búsqueda y marcar la opción Derechos de Uso, filtrando el tipo de derecho que pretendes llevar a cabo para ver si encuentras una imagen que te sirva.
3. En su defecto, te recomendamos que utilices bancos de imágenes. Hay muchos donde puedes conseguir imágenes gratuitas y con cierto tipo de derechos y licencias que te permitan utilizarlas para tu blog.
4. En cualquier caso, si ninguna de estas opciones te sirve y quieres utilizar una imagen en concreto, si conoces al autor, o sabes cómo llegar a éste/a, lo más recomendable es que te pongas en contacto con él/ella y le solicites su permiso. Nuevamente, es imprescindible que te lo haga llegar por escrito y yendo bien, en esta autorización se debería detallar la finalidad en concreto que le vas a dar tú a esa imagen en tu blog o donde hayas acordado.
Piensa que toda imagen o fotografía tiene derechos de autor por el hecho de su simple creación por el autor que corresponda y que en virtud de ello, si ese autor puede probar que tú utilizaste su imagen sin solicitarle permiso o sin abonar el precio que correspondía en el banco de imágenes donde estaban sus fotografías, puede llegar a reclamarte por ejemplo, por el número de días que haya detectado que hayas venido utilizando esa imagen.
Como te decíamos al principio, cuidado también con la utilización de imágenes de personas a las que conocemos; o que no conocemos y hemos encontrado por Internet. Si utilizamos este tipo de fotografías más personales donde aparece reconocible una persona, ya no estamos infringiendo, en su caso, solamente los derechos de autor, sino que puede que infrinjamos la normativa de protección de datos y la de derecho al honor y la propia imagen con lo que te recomendamos, de nuevo, tengas cuidado y solicites su autorización por escrito.
En cualquier caso y siempre que puedas, lo más recomendable es que utilices imágenes propias. De este modo, evitarás riesgos y molestias.
También recomendarte que te informes o asesores respecto a cómo proteger las imágenes y contenidos de tu blog frente a terceros. Ello podrá evitar que otros se aprovechen de lo que tú has creado.
Si tienes cualquier duda sobre qué es lo que tienes que hacer en algún caso concreto o en general, no dudes en contactar con nuestro despacho. Te atenderemos encantados.
Lo habéis explicado a la perfección. Lo único que he hechado en falta es explicar el copyleft. pero por lo demás, chapó.
Un saludo
¡Muchas gracias por tus comentarios, compañero! Bueno, lo del copyleft se merece un post por sí solo. Lo prepararemos. Un saludo para ti también.