Si eres diseñador gráfico, creativo publicitario, creas contenidos; grabas, diriges o realizas el montaje de producciones audiovisuales o musicales, o te dedicas a cualquier actividad por la cual hayas creado algo, es importante que tengas en cuenta cuáles son tus derechos.
¿Qué derechos tienes como autor?
Como autor de cualquier obra te corresponden los derechos morales que son aquellos que son inalienables y que significa que tienes derecho a exigir respeto sobre tu obra (que no la alteren, la manipulen, la utilicen para fines ilícitos…) y, además, los derechos de explotación (a no ser que hayas pactado algo en contrario con alguna empresa). Los derechos de explotación consisten en el derecho a explotar tu obra mediante su reproducción, su distribución, comunicación pública o transformación.
¿Por qué es necesario registrar?
La autoría de una creación es de su autor, independientemente de que la registre. Ahora bien, como siempre, el problema está en poder probar que eso es tuyo. Por eso, muchas veces lo recomendable es registrar tu obra ante los registros oficiales correspondientes, como el Registro de Propiedad Intelectual para el caso de obras literarias, artísticas o científicas o el Registro de Patentes y Marcas para patentes, marcas, diseños industriales (moda, productos…) y modelos de utilidad o topografías de semiconductores.
Entidades de gestión
Además, para poder defender tus derechos, en España muchas veces es necesario registrar, inscribir o proteger tus obras con la ayuda de determinados organismos como:
– La SGAE (Sociedad General de autores) en el caso de obras musicales, audiovisuales o artes escénicas, desde donde se ocupan de velar por que cobres los importes correspondientes a los derechos de tus obras.
– CEDRO para los derechos reprográficos.
– VEGAP, entidad de gestión de artistas plásticos.
– DAMA, para los derechos de autor de medios audiovisuales.
– AIE, para artistas intérpretes o ejecutantes.
– AISGE, para artistas e intérpretes.
– AGEDI, para la gestión de derechos intelectuales.
– EGEDA, para la gestión de derechos de productores audiovisuales.
Otros mecanismos para proteger tus derechos
A parte de los organismos y entidades mencionadas arriba, existen otros mecanismos reconocidos mediante los cuales podemos velar, también, por la defensa de nuestros derechos. Una forma, por ejemplo, es registrar nuestra obra en la plataforma online Safe Creative. Se trata de una plataforma en la que podemos registrar nuestras obras, teniendo una prueba de que esa obra es nuestra, por un lado, y donde además podemos vincular nuestra obra a las licencias Creative Commons de las que ya hablamos otro día.
Además de todas estas consideraciones, desde mi punto de vista también es importante que tengamos en cuenta otros aspectos como, por ejemplo, si disponemos de una página web o un blog y queremos proteger tanto su diseño como su contenido. En este caso, será conveniente que, aparte de registrar nuestra obra mediante los mecanismos indicados en este post, dispongamos de unas buenas condiciones de uso o política legal en la que se indique lo que se puede hacer con nuestros artículos u obra y lo que no, todo en línea con lo que hayamos registrado y necesitemos o queramos proteger.
También debe tenerse en cuenta que en función de los casos, para la comercialización de nuestras obras, en su caso, será necesario regular lo que queremos hacer con quienes se ocupen de algunos aspectos como, por ejemplo, distribuir o reproducir nuestra obra. En estos casos, será necesario firmar un contrato en el que queden debidamente plasmados los derechos y deberes de cada una de las partes, las garantías ofrecidas y precio correspondiente, entre otros aspectos.
Queda claro, pues, que proteger una obra es algo bastante complejo pero necesario en muchos casos. Una buena protección puede garantizar una buena venta o comercialización de tu obra o producto por lo que si creas algo y lo quieres proteger, te recomendamos te asesores bien al respecto. También debes tener claro si realmente eres tú el autor o se trata de una colaboración, participación o creación llevada a cabo por razón de tu trabajo, o bien se trata de un encargo. En todos estos casos, habría que ver la situación concreta ya que pueden cambiar tus derechos con respecto a la obra.
Artículo originalmente publicado en Legaltis – partner de Avatic Abogados en mayo de 2013
Autor: Vanesa Alarcón
Imagen de Stuart Miles (www.freedigitalphotos.net)